martes, 6 de enero de 2009

"Pelo malo"

Cuando llegué a residir a Las Tunas, época en que había decidido llevar mi cabello de forma natural, algunas mujeres de mi entorno de trabajo, solían preguntarme: "¿Y por qué no te arreglas el pelo?". Yo respondía que lo tenía peinado y hasta me lo teñía de tonos oscuros. Y me replicaban: "No, no. ¿Por qué no te lo desrizas, te das un color claro...?"Siempre tuve mucho volumen de pelo y cuando me bequé a los 11 años, mi mamá decidió alisarme un poco el cabello para que me fuera fácil de manipular. Así lo conservé durante unos 10 años más, durante los cuales, usé rolos (o rulos), fui cada semana a la peluquería y dediqué más tiempo del que me gustaba a conservar un peinado "lacio". Fue en la Universidad cuando decidí dejarme mis riiiiizos.
En realidad, no sucedió porque me hiciera muchas preguntas al respecto, sino que pensé: "Si siempre traigo el cabello recogido, porque es fino y el molde le dura poco, entonces para qué desrizarlo?" Así comencé a ahorrarme el tiempo, dinero y la obligación de estirarlo. De esa época a esta parte, he tenido que soportar invariablemente la insistencia de las peluqueras , y de otras clientas asombradas, para que me aplique productos para alisar mi pelo. Y a cada una respondo, sin opción para la réplica: "A mí me gusta así".
Igualmente, otras personas me dicen: "A ti te queda bien el pelo así, rizo". A mí no se me ocurriría decirle a alguien: ¡qué bien te quedan tus orejas! Pero, por esta parte de Cuba, las mujeres suelen cambiar constantemente el color, corte, textura... del pelo. De hecho, cuando vine de visita por primera vez, me pareció que todas lo llevaban decolorados u oxigenados.
Desde pequeñas escuchamos decir que nuestro cabello es "pelo malo" o "pasa" y nosotras mismas aprendemos a reírnos de él y a intentar "domesticarlo" con productos de diversos tipos. Los estereotipos sociales casi no conciben llevarlo al natural. Del "peine caliente", al desriz casero con potasa, se ha pasado a las cremas industriales, los implantes y las trenzas, cualquier cosa menos el "afro", antologado aquí únicamente en los años 60 y 70. Los patrones de belleza de las revistas, etc. no ofrecen alternativas sobre este particular. Enfrentarse a estos esquemas depende, sobre todo, de la valentía para andar por la vida o la aceptación que cada persona tenga de sí misma. Mire, usted, todo esto solo por tener un pelo "diferente".

6 comentarios:

Unknown dijo...

Me gustó el comentario, muy bueno. Yo tambièn llevo mi cabello natural y aunque por esta parte del mundo eso no es muy importante (al contrario, siempre hay en la calle quien quiere tocarlo) sé que si estuvier en mi isla escucharía los mismos comentarios que tú.

Mucha suerte!

Anónimo dijo...

Iris..hay que escribir un libro sobre esto. Tan temprano como esta mañana visité un salón de belleza para acondiciar mi pelo, el mismo que llevo naturalmente rizo luego de muchos años de aceptación propia. Y nuevamente me encuentro, aunque de forma sutil, con una corriente sin tregua que quiere encaminarte hacia el pelo liso, o por lo menos, el rizo con rolos de secadora. Es increíble cómo al día de hoy, todavía a la gente común le parece increíble que una lleve su pelo naturalmente rizo. Es símbolo de no cuidarlo bien, de poca elegancia y seriedad en nuestro "look", y hasta de descuido personal. Cuándo será el día en que este esquema gastado ya deje de ser nuestra cruz.

El sitio de Iris dijo...

Gracias a las dos por comentar. Pienso que las cuestiones de las apariencias lo tratan como algo frívolo. Pero, este tema del cabello lo veo más allá, como muestra de racismo y no aceptación a lo diferente. La presión social existe y en esto es bastante fuerte. En provincia, mucho más, en algunas de mayoría negra como Santiago y Guantánamo se lleva el pelo desrizado, y en las de predominio blanco como Holguín Y Las Tunas, es casi un desacato dejarlo rizo. Más al Occidente son un poco más flexible para la vida ajena. Un poco. Nos vemos.

Anónimo dijo...

Iris esto lo del pelo malo va mucho con mi vida.Muchas veces soy humillada en el colegio por mi cabello malo.desde mi infancia he siempre hay una persona que critica mis cabellos.Muchas veces cuando recuerdo estas cosas mis lágrimas se asoman y se deslizan por mi mejilla.
Gracias a Dios he aprendido a no hacerles caso esas personas que quieren atormentarme.
Tuviste muy buena elección en aceptar tu pelo como es. ¡SUERTE AMIGA!

Maria dijo...

Hola Iris, me gusto muchisimo esta lectura ya q todo lo q tu dices en ella es precticamente mi realidad, mis amigas siempre me dicen pero xq no te lo alisas, asi te verias mejor, y practicamente nunca voy a las peluquerias porque ninguna peluquera quiere tratar mi cabello y esto me ha llevado a una gran desmotivacion con mi cabello, he pensado en desrizarmelo, en colocarme extenciones y muchas cosas mas pero eso en mi pais sale bastante costoso, y ls verdad es que si tengo muchisimas ganas de alizarlo porque como ya te dije practicamente todas las personas me lo recalcan a diario y la verdad ya hasta ni siquiera recuerdo cuando fue la ultima vez q me lo deje suelto ya q siempre conseguia una burla, y claro q me acostumbre a ellas desde pequeñas pero llega un momento en el que una se cansa. me gustaria un consejo tuyo. gracias

Anónimo dijo...

Hola Iris, como tú hay muchas mujeres en Cuba sobre todo jóvenes que optan por llevar su pelo al natural. Yo desde los 15 lo tuve desrizado, más por embullo mío que por el de los demás porque para mi es mucho más cómodo y más fácil de mantener. Eso no quiere decir que para nada tenga complejo de mi pelo natural, ni de mi raza.
Ahora la situación para mí es completamente diferente a la tuya, como ha vuelto la moda "afro" cada vez que voy a una peluquería la pregunta es: por qué no te dejas los rizos sueltos...?
Entonces ahora porque cambia la moda tengo que cambiar mi peinado? Mi peinado dice todo de mi y de mis creencias? Acaso no decimos siempre que las apariencias son solo apariencias?