Mostrando las entradas con la etiqueta Internet. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Internet. Mostrar todas las entradas

martes, 4 de agosto de 2015

Los rostros iluminados por la wi-fi en Cuba

En Las Tunas hay dos áreas para la conexión wi-fi a internet: la Plaza Martiana (en el centro) y el Tanque de Buena Vista (la zona más poblada de la capital provincial). Todos los día a cualquier hora hay personas utilizando este nuevo servicio de etecsa que incluye a otros 33 espacios en todo el país. Pero, por las noches es una suerte de avalancha lo que ocurre hacia esos lugares donde las pantallas de las tabletas, móviles y laptops iluminan los rostros.

A 2.00 cuc la hora se adquieren las tarjetas para acceder a esta prestación, que, según quienes la han adquirido, ofrece una velocidad aceptable. Fuera de esos lugares céntricos, en los restantes municipios por ejemplo, la vida discurre con total normalidad. La gente de a pie ni siquiera sabe qué es esta red o el fenómeno que ocurre en las ciudades capitales.
Los jóvenes sobresalen entre los conectados y desde el pasado primero de julio han convertido la wi-fi en otra opción de verano a juzgar por la cantidad de ellos que se enfrascan en buscar y utilizar la señal inalámbrica. Sin embargo, también se pueden ver numerosos niños y adultos mayores comunicándose con sus seres queridos.
IMO es la aplicación que domina la comunicación en este caso desde las tabletas y teléfonos. La posibilidad de ver a la otra persona desde distancias lejanas ha tenido un debut por la puerta ancha con la wi-fi. Y, es que la conexión estatal no permite las videollamadas, ni el acceso a Skype o similares. Hay quienes creen que internet es solo eso y Facebook por la posibilidad de acortar la separación de los seres queridos. No obstante, la falta de privacidad en esos espacios públicos hacen que los transeúntes se lleven trozos de conversaciones a su paso.

viernes, 16 de abril de 2010

Evoluciona el teléfono


Alexander Graham Bell habría estirado su chaleco, torcido la punta del bigote para entrar en la historia. El siglo XIX se hallaba a la altura del año 77. Al menos de esa manera la humanidad había confiado en los hechos.
Durante decenas de años se aseguraba que la primera comunicación telefónica había tomado vida, cuando aquel norteamericano descubrió que modificando la corriente eléctrica continua se podían imitar las vibraciones de la voz humana. Un aparato emisor y uno receptor unidos por un único cable conductor permitieron el milagro. Pero, no fue así.
Un fallo del Congreso de los Estados Unidos le atribuye el mérito al italiano Antonio Meucci, quien lo demostró en público en Nueva York en 1860, 17 años antes de que Graham Bell lo patentara. Se asegura que Bell aprovechó la convalecencia de un accidente que postró a Meucci. Así patentó el invento. Antonio murió en 1889 esperando el momento que le devolviera el fruto de su ingenio. En Cuba se levantaron por primera vez los auriculares a escala pública en 1881. Por cierto, poco después, una central automática habanera llegó a incluirse entre las más modernas del planeta. Sus líneas estaban conectadas con el territorio de los Estados Unidos por medio de un kilométrico cable submarino que descansaba sobre el fondo del Estrecho de la Florida. A La Habana le corresponde el mérito de servir de escenario para los experimentos del italiano Meucci.
En el período inicial se realizaban pruebas y pocas instalaciones con equipos importados de Estados Unidos. Escaso tiempo después el servicio cobraba importancia en la sustitución y mejoramiento del telégrafo. Mas el año del nacimiento oficial de la telefonía pública aquí data de 1881. Y, como era de suponer, el beneficiario número uno fue el representante de una sociedad norteamericana.
Las páginas históricas del teléfono en la isla grande incluyen con colores vivos la aparición de una central automática entre las primeras del mundo, al tiempo que se inauguraba el servicio nacional en 1910. De forma similar debutó la red telefónica internacional en 1916, mientras se conectaban las dos redes nacionales con un cable submarino.
Durante toda esta etapa no es difícil imaginar a quien pertenecía el servicio y sus dividendos: la recién estrenada Cuban American Telephone and Telegraph Company. Con el triunfo del 59 los foráneos dejaban atrás un pobre desarrollo telefónico en el interior del país y contados aparatos registrados. No obstante, el impulso fue lento en el primer decenio y luego se asiste al crecimiento anual más elevado de la densidad telefónica entre 1972 y 1982 (3,54 por ciento), pues coincide con la instalación acelerada de líneas de una punta a la otra del país. De 1982 a 1992, fue de 2,26 por ciento. En toda esta etapa se desarrollan las comunicaciones internacionales, las de larga distancia por microondas y, posteriormente, por cable coaxial.
En aquellos primeros años, el servicio no se asemejaba al de ahora. Los equipos eran pesados, grandes, de manigueta y se debía pedir toda llamada a las operadoras, generalmente mujeres. Y sus poseedores pagaban caro el privilegiado lujo. Ni siquiera Antonio Meucci podía predecir la significación que lograría el invento. H
oy el avance tecnológico no cuestiona su existencia, sí cómo hacerlo más perfecto, al punto que se comercializan algunos que no solo reproducen alta fidelidad en la voz, sino que ofrecen una serie de funciones como números memorizados, desvío de llamadas, espera de llamadas en línea e identificación del emisor, unido a la posibilidad de portarlos en los bolsillos.
Lejos de la añeja polémica sobre el inventor del aparato telefónico de si Graham Bell se adjudicó la patente de la creación de Antonio Meucci, a estas alturas del progreso no he escuchado ningún vaticinio atrevido de que en un futuro cercano pudiera eclipsarse esta prestación. Los canales de comunicación evolucionan, llegaron a niveles insospechados hace una década, sin embargo al teléfono solo se le relaciona con perfeccionamiento. Nunca desaparición, ni siquiera con la ampliación en el uso del correo electrónico o el iPad.

sábado, 30 de enero de 2010

Las redes sociales en Haití


Las llamadas redes sociales se han abierto un respetable camino en el mundo web 2.0 En lo personal, prefiero dedicar mi tiempo on line a los blogs, escribir y leer los ajenos, además de los sitios noticiosos. No todos los blogueros llevan con similar pasión sus bitácoras y su presencia en Facebook y Twitter, por ejemplo. Es como si dijéramos: blogueas o haces microblogging y actualizas el perfil.
Las redes sociales tampoco suelen admitir medias tintas. La mayoría de los usuarios se hacen fanáticos a ellas y activos participantes, o le dan la espalda con sus defectos como estandartes. Pero, en este caso cuesta mucho mantenerse en el medio. Es como si en sí mismas ofrecieran un conmigo o lejos de mí.
El catastrófico terremoto de Haití, del 12 de enero, catapultó a Facebook y Twitter al sitio de honor de herramientas indispensable en el mundo de hoy para casos de desastres. Los medios han reconocido como las primeras y más valiosas fotos de los efectos del terremoto, las tomadas por testigos presenciales, aficionados con sus teléfonos móviles mayoritariamente, y sin enviarlas a los medios de prensa, sino colgadas en las redes. Luego, los voluntarios, socorristas, familiares recién llegados... registraron las suyas y se amplió el espectro visual de la devastación.
El seguimiento noticioso de la tragedia, la destrucción y la muerte en Haití se alcanzó en buena medida por las imágenes en la red. Los medios de prensa se han nutrido de este caudal informativo, que muchas veces lleva la impronta de un profesional y otras de los propios haitianos mientras viven su drama.
La localización de familiares por medio de la web, la creación de páginas y espacios en Facebook ha sido otro de los invaluables resultados de las redes por estos días. La actualización día a día de la situación en el país caribeño y del estado de salud de los parientes ha servido de mucho a quienes han estado fuera de la isla. Las diversas campañas de recaudación todavía incrementan los fondos con el incesante teclear frente a una pc y el amplio poder de convocatoria de las redes. Y, es que para los especialistas resulta casi increíble el hecho de que la mayoría de la infraestructura de conexión a internet sobreviviera al sismo por encima de los canales tradicionales. Este hecho nos permitió, al resto del mundo, calibrar lo que acababa de suceder en esa porción de La Española.

jueves, 28 de enero de 2010

Este blog recibió un premio

Desde que comencé la actualización periódica del blog, casi todos los días recibo el Premio que para mí representan los números de visitantes, los comentarios que me dejan algunos y, como si fuera poco, he sido reconocida con la Amistad que me han regalado las personas que suelo mencionar aquí y que, en serio, considero mis amigos aunque no sepa el timbre de su voz, o sea incapaz de identificarlos en la calle de alguna ciudad donde están (si viajara, jeje). También me pasa con quienes veo a diario y el blog me ha permitido estrechar la relación hasta hacerla cercana.
Pues ahora, mi colega bloguero Juan M. García me relaciona entre cinco personas que él premia por su blog Desde Cuba. Muchas gracias, Juan.

Desde Cuba ha recibido el Premio Blog Z@rapico de manos de Amparo Ballester y su blog VerbiClara.

El premio fue propuesto inicialmente por Norelys Morales Aguilera, en su blog Islamía al blog Cambios en Cuba, de Manuel Henríquez Lagarde, e inspirado en el Sensible Zarapico, Samuel Feijóo, poeta, investigador folklórico, editor, narrador, maestro y dibujante villaclareño que nombraba de esa forma tan peculiar, en alusión a esa ave, a la que elevó a símbolo estético y ético de la posición revolucionaria ante la vida y el arte, la búsqueda de una creación cada vez más consecuente con el desarrollo del ser humano por una sociedad en verdadera armonía con la naturaleza.

¿QUÉ ES EL PREMIO Z@RAPICO Y CÓMO SE OTORGA?

“Un premio destinado a blogs o páginas web que se destacan por su forma y contenido revolucionario, solidario, comprometido con las luchas sociales anticapitalistas en todo el mundo y contra el holocausto ambiental”, según la siguiente metodología:

1.- Al recibir el premio, se escribirá un post y se mostrará la imagen del premio, indicando el nombre del blog o web de quien lo otorga y enlazarlo al post de ese blog o web que le nombra ganador.

2.- El número de blogs premiados será hasta cinco, simbolizando a los cinco luchadores cubanos antiterroristas, prisioneros en cárceles de Estados Unidos.

3.- Escribir los nombres y los enlaces a los premiados. Avisarles que han sido premiados con el Premio Blog Z@rapico.

4.- Estos cuatro puntos de la metodología deberán incluirse en el post redactado a fin de que se conozca cómo otorgar el premio. También, se sugiere decir que el zarapico es un ave que el escritor y periodista cubano Samuel Feijóo elevó a símbolo estético y ético de la posición revolucionaria ante la vida y el arte, la búsqueda de una creación cada vez más consecuente con el desarrollo del ser humano por una sociedad en verdadera armonía con la naturaleza.

Los blogs cubanos que premia El sitio de Iris son:
1- Una familia en Cuba, de Marilú Hernández Guerrero, Las Tunas.
2- Buena suerte viviendo, de Lázaro Sarmiento, La Habana.
3- Yo Cuba, de Yolanda Molina, Pinar del Río (Así espero que regrese al mundo blogger)
4- La polémica digital, de Elaine Díaz, La Habana.
5- Cuba izquierda, de István Ojeda Bello, Las Tunas.

lunes, 22 de junio de 2009

Actualizar el blog

Muchos investigadores sostienen que los blogs significan otra manera de hacer Periodismo, desde una perspectiva más personal, intimista y coloquial. Pero, todavía no he tenido tiempo de adoptar una postura al respecto. Hacerlo tendría la base de algún estudio que incluya a quienes manifiestan su voluntad de contar la vida desde un prisma único e irrepetible aportado por cada bloguero; incluiría en ese criterio, por ejemplo, a quienes cuentan la guerra en Iraq con enfoques diferentes al de los grandes medios o a quienes siguen un hecho desde la perspectiva de ser sobreviviente. Un momento, creo que eso es Periodismo. Lo que sí queda claro es que en todos los blogs no se hace Periodismo, ni existe la intención.
Mientras tanto, sí quiero comentar un punto común de los blogs con los medios tradicionales: la necesidad de estar actualizados. Y de esto estoy segura. Cuando decidimos abrir una de estas páginas, por lo común no le decimos a nadie con qué frecuencia vamos a subir un post. Eso sí, al ganar visitantes nos exigen con su clic que publiquemos una nueva entrada. Al menos yo he olvidado algunas páginas porque encontré el mismo material por demasiado tiempo. Otras bitácoras que me gustan mucho y se demoran para actualizar, las enlacé a El sitio de Iris, para mantenerme al tanto del momento en que suban una nueva reseña o comentario.
Un blog es también una responsabilidad, como una mascota necesitada de afecto cotidiano o una planta, y se supone que una no lo abandone. Pero, qué hacer cuando no aparecen las musas para escribir algo digno o escasea el tiempo. Nos queda la voluntad de no dejarlo para siempre, como el libro pendiente que aguarda en una gaveta porque el autor se anime, salvando la distancia con el autor. Más que eso, nos quedan los visitantes pacientes dispuestos a esperar, o quienes llegan por primera vez y no le prestan atención a la inequívoca fecha, recordatorio antes de leer el título del post, de que, por ejemplo, hace días la propietaria de este espacio no se sienta a escribir.

martes, 20 de enero de 2009

Razones para bloguear



La gente suele adorar los números "cerrados" para proponerse comenzar algo o rendir homenajes. Yo no soy la excepción. Había pensado escribir sobre la experiencia de tener un blog cuando llegara a los mil visitantes, luego me fijé otro número, pero.... Por diversas razones no había podido cumplir ese deseo. Por ejemplo, cuando se sumó el millar, el huracán Paloma azotaba el sur de Las Tunas y Camagüey y los visitantes ávidos por saber entraron a El sitio de Iris y sobrepasaron ese número con rapidez. Así que lo dejé para más adelante por la urgencia de seguir el ciclón. He visto desfilar varios dígitos terminados en "cero" o en "cinco" sin poder llevar adelante esa idea. Porque algo sí está claro: cada bloguero debía de compartir con sus seguidores cómo les va con su nueva vivencia.
Después de descubrir esta vía de comunicación, una se pregunta ¿cómo no había iniciado antes? ¿y yo qué estaba haciendo sin abrir un blog? Si te sientes solo, crea un blog. Si eres periodista o escritor y se te quedan temas en el tintero, despáchate en un blog. Si no te entusiasma hacer ejercicios u otra forma de evadir el estrés, hazte un blog. Lo más importante es tener algo que decir y siempre tendrás "oídos" receptivos. Pero, hay que estar preparados, esto casi obsesiona, hasta que llega la calma.
"Postear" y dejar que otros lean, sin retocar, pulir, buscar sinónimos, cambiar la sintaxis, da cierta comezón a quienes, como los periodistas, acostumbramos a revisar una y otra vez antes de entregar. En cambio, para mí el blog debe llevar espontaneidad, escribir directo a la plantilla, sin chapucerías, con ideas bien pensadas, pero algo auténtico que luzca tu sello personal. También imaginar a un lector potencial, hasta tener tus propios lectores; ser breves y buscar la estructura gramatical más clara.
Antes de dar nombre al blog, hace falta saber qué decir y tener claro que no es un medio de prensa, con sus reglas y normas, aunque no se debe menospreciar la efectividad de las bitácoras para seguir y analizar un hecho noticioso. Ahora, la delicia de los blogs son los comentarios. No solo entusiasman para seguir y actualizar con regularidad, sino que enriquecen el texto inicial hasta convertirlo, a veces, en una joya. La retroalimentación proporcionada por los comentaristas hace palidecer de envidia a cualquier medio de prensa tradicional que, ni con llamadas telefónicas, encuestas, sondeos, ni correos electrónicos, han logrado tan rápida forma de comprobar la repercusión de la publicación.
Los blogs son un espacio personal y todos deseamos que nos visiten y lean, si no es mucho pedir también que nos dejen algún mensajito. Por eso, abundan en internet los contadores gratis y formas de llevar las estadísticas de tu sitio. Vamos, no me lo niegues, a todos nos gusta saber que lo que pensamos/decimos importa, gusta, hace pensar (sin ser pretensiosa, eh?).
Por eso, más importante que la cantidad de visitantes, es el tiempo que demoran las personas en tu sitio, si comentan, te incluyen entre sus enlaces, se convierten en seguidores o como en el turismo aumenta el índice de repitencia.
Los blogrolls dicen mucho del propietario de la bitácora, funciona como "dime con quién blogueas y te diré quién eres". En lo personal, además de agregar los blogs que me gustan, creo que esta es una forma de retribución cuando alguien desde su página hace que me lleguen más visitantes. Gracias.