martes, 24 de febrero de 2009

De trabajos de diploma y tareas escolares

La impresión y encuadernación de los trabajos de diploma en Cuba se estaban convirtiendo en motivo de estrés y gastos para los estudiantes y la familia; ceba para algunos inescrupulosos y escape de recursos destinados a otros fines en determinadas entidades. Como no hay mal que dure 100 años, el Ministerio de Educación Superior emitió recientemente una disposición para poner fin a esa situación convertida en un real dolor de cabeza, y que generaba diversos criterios y quejas de la población.
Ante la imposibilidad de crear una institución que se dedicara a esos fines o que los centros académicos asumieran la responsabilidad, se decidió a partir del presente año docente recibir las conocidas tesis de culminación de carreras universitarias únicamente en soporte digital. Los acuerdos al respecto enfatizan en que se aceptarán impresos los planos, proyectos o documentos que por determinada razón así lo justifiquen.
También se advierte que para el postgrado – Tesis de Maestría, de Doctorado y de Especialidades- se reducen la cantidad de copias y el número de páginas por ejemplar.
De esta manera, se crea una coherencia, entre las exigencias curriculares y las dificultades para adquirir los materiales necesarios para la impresión y encuadernación de los trabajos de diploma, además de las limitaciones económicas objetivas que afrontamos.
Con esta disposición ministerial, también se espera que en lo sucesivo se sumen a estas medidas otras que se aplican en algunas escuelas y que no constituyen, desde mi apreciación, una fórmula eficaz para medir los conocimientos y habilidades adquiridas.
La irrupción de las nuevas tecnologías impulsó a que, en ocasiones, se solicitara a los alumnos de otras enseñanzas, incluso de Primaria, la entrega de trabajos prácticos o los de curso, no solo tecleados, sino impresos en computadoras y con carátulas en colores. Escuché casos en que hasta se podía perder puntos de la evaluación final cuando no se cumplían esos requisitos, o se premiaba la forma por encima del contenido de los materiales entregados.
Quizás no huelga decir, que algunos padres se desempeñan en lugares donde tienen acceso o posibilidades para seguir esas demandas escolares, pero otros, tal vez la mayor parte, carece de estos medios para teclear, imprimir y decorar tales trabajos. Las escuelas disponen de laboratorios de Computación a los que sí asisten los alumnos y donde pueden hacer sus tareas y demostrar lo aprendido.
En lo adelante, resta porque a los acuerdos del MES, y que involucran al MINED, al INDER y las sedes municipales, se sumen los restantes centros tanto de Educación Superior como otros niveles de enseñanza, para que las tareas escolares y trabajos extraclases sean únicamente una manera de comprobar lo aprendido sin comprometer más allá.

No hay comentarios.: