viernes, 22 de enero de 2016

Cuando la tierra se sacude

El viejo refrán que hace mirar nuestra realidad cuando sucede algo al vecino nos obliga por estos días, de temblores constantes en la tierra santiaguera, a revisar el qué hacer en caso de sismo, volver a mirar nuestra geografía, estudiar el tema para saber posibles efectos en la región (como tsunamis). Estas son algunas ideas recurrentes. Además de sumarnos al pedido de misericordia de muchos dentro o fuera de los límites bajo vigilancia hoy. Sin embargo, para algunos especialistas particularmente de la Construcción en Las Tunas, es tema de estudio desde hace décadas.

Uno de ellos es el hoy máster en Ciencias Josué Raúl Rodríguez, ingeniero que se desempeña en la Empresa de Proyectos (CREVER), y cuya investigación presentada para obtener ese grado científico en Ingeniería Civil se relaciona con la evaluación de la vulnerabilidad sísmica estructural de algunos sistemas constructivos empleados aquí. Y, como es de suponer, aunque el objeto de estudio se queda en la provincia, los llamados prefabricados tipo Gran Panel también se aplicaron en edificaciones del resto del país.

Mucho antes, el ingeniero había explicado que la realidad impone la necesidad de construir edificaciones a partir de las normas sismos resistentes establecidas en el país. Hace algunos años se comenzó a exigir en los proyectos y a ejecutar con estos requisitos de diseño. Por ejemplo, las construcciones de más de tres niveles para edificios de uso público deben llevar columnas, lo cual garantiza durabilidad y resistencia tanto para los sismos como para los fuertes vientos. En las viviendas se resolvería con columnas de tipo catalanas, dentro de los muros.
Su tesis cobra especial importancia en la actualidad y recomienda normas que deben seguirse para reforzar algunos edificios con más de tres décadas de uso. 
En el período comprendido entre 1970 y 1990 se construyeron comunidades urbanas en Las Tunas utilizando edificios del sistema prefabricado Gran Panel IV. En esa etapa no se incluía esta área geográfica como zona de peligro sísmico. En el año 1999 se aprueba el código NC 46:99 que contempla un nuevo mapa de zonificación sísmica a partir de los estudios de peligrosidad sísmica obtenidos por Chuy y Álvarez, (Chuy, Álvarez, 1995), en el cual se incluye a la Ciudad de Las Tunas como zona de baja sismicidad.
A partir de esta investigación específicamente se logra evaluar la vulnerabilidad estructural de algunas edificaciones que se corresponden con la tipología constructiva estudiada sobre la base de la ingeniería sísmica actual. De esta manera el máster propone que se tengan en cuenta las recomendaciones para la rehabilitación en el caso del sistema Gran Panel-IV. En otros, se logra la introducción de mejoras estructurales en las juntas y los paneles, desde la etapa de proyecto, que posibilitan la construcción de edificaciones seguras y más económicas. 
Son los terremotos los desastres naturales que más impacto negativo han tenido sobre la humanidad desde sus comienzos, por su poder destructivo. Estos fenómenos tienen un alto impacto en zonas urbanizadas o densamente pobladas, donde existen mayor cantidad de obras de infraestructura e instalaciones básicas expuestas.

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